lunes, 18 de junio de 2012


Jesús María, la comunidad carpintera

La comunidad de Jesús María

Jesús María es un municipio del estado de Aguascalientes, México que se localiza a once kilómetros de la capital del Estado, en la parte centro-oeste. De acuerdo al XII Censo General de Población y Vivienda 2010 efectuado por el INEGI, la población total del municipio es de 64,097 habitantes, de los cuales 31,193 son hombres y 32,904 mujeres. La población total del municipio representa el 6.78 por ciento, con relación a la población total del estado.

La comunidad de Jesús María se caracteriza por la industria de la mueblería, y es que desde hace varios años, casi desde los orígenes del municipio, la producción de la mueblería ha estado latente; siendo un sustento para la gran población de hombres que se dedican a este oficio. El municipio cuenta con varios talleres independientes de baja y alta calidad, así como también con 3 grandes empresas de mueblería. La diferencia entre los talleres y las empresas, a pesar de su productividad y entre otras cosas, es que en los talleres “pequeños” se puede realizar lo que el cliente quiera, es decir, si “x” persona desea un diseño europeo o de otra parte del mundo, ellos lo harán. Mientras que en las grandes empresas, la producción se efectúa por grandes pedidos y sobre catálogo (también se puede bajo un estilo de gusto personal pero eso aumenta el precio de la mercancía). Sin embargo, en ambos espacios de labor carpintera se encuentran inmersas las generaciones familiares. El abuelo trabajó de carpintero, el padre también y el hijo es carpintero, en su mayoría lo carpinteros habitan en la comunidad de Jesús María, siendo así que, la misma comunidad asegura la mano de obra para que continúe de píe la industria del mueble.

Planteamiento epistemológico

El método de la economía política

En “crítica de la economía política”, escrita algunos años atrás, Marx expresa la metodología de la captación del movimiento: ¿cómo se va dando la construcción de los sujetos? Principalmente nos menciona que la guía esencial del método científico debe de ser lo que va de lo abstracto a lo concreto, Marx lo llama, método de exposición aunque sea el concreto real el verdadero punto de partida (Zeleny, 1974 en De la Garza, 2011).
La distinción entre lo abstracto y lo concreto pensado, es decir, “entre categorías y conceptos (…), remite a que estos últimos son síntesis de más determinantes que las primeras, pero el camino de la exposición de lo abstracto a lo concreto es de inclusiones sucesivas donde las últimas, las más concretas, presuponen a las más abstractas” (De la Garza, 2011; 10). Por lo tanto, el método de lo concreto-abstracto-concreto es una método de construcción de teoría desde dos etapas: la primera “investigación” y la segunda la “exposición”; es aquí donde entra en juego la función de la metodología de la totalidad como la reconstructora de la acumulación de teoría. La fase de la investigación, menciona Marx, se trata de que las intuiciones y las representaciones acuñadas por el investigador sufran una metamorfosis para ser parte de conceptos, ya que éstos son históricamente determinados y por lo tanto, las abstracciones existen en la particularidad de lo concreto (De la Garza, 2011). Pero no hay que olvidar el dato empírico; éste nos sirve para verificar hipótesis subsidiaras a la reconstrucción, es decir, que no nos ayude a explicar los hechos  sino a describirlos. Recuérdese, como lo menciona De la Garza (2011): la totalidad no debe entenderse como un todo, infinito por definición, sino lo pertinente a la explicación del objeto. La explicación se logra cuando se ha construido la totalidad del objeto.

La reconstrucción de los hechos históricos, que son guía en la construcción del proceso, es esencial para la información empírica-histórica y apuntada por la ebullición de los conceptos. Dicho de otro modo, los procesos históricos son mecanismos para entender cómo se van dando los conceptos, los cuales ayudan a la explicación y rearticulación de sí mismos. Ya que los datos dependen siempre de los conceptos utilizados pero también de las interacciones entre el investigador y lo investigado y de los sentidos que el primero suscita en el segundo (De la Garza, 2011).

La descripción articulada.

La función  epistemológica central del conocimiento es definir espacios para la acción viable y no la correspondencia entre pensamiento y realidad (Zemelman, 1997). Para definir el problema de la investigación social, el de tiempo presente, Zemelman afirma que su trabajo no es el de la explicación, “porque el presente que implica potencialidad de lo dándose, no es susceptible de anticipación teórica porque el futuro no está predeterminado” (De la Garza, 2011; 14). Lo futuro se está dando día a día, no se sabe qué cosa va primero y qué después, lo cual exige construcciones conceptuales más organizadas para que a través de ellas se pueda dar la desestructuración de los corpus teóricos preexistentes (De la Garza, 2011).

Hugo Zemelman menciona a los sujetos sociales, ya que ellos, son arrieros de su historia y por lo tanto, son una construcción. Por tal motivo se interesa por la construcción del  sujeto social, ya que éste rebasa la relación entre teoría y práctica. Siendo así que, los sujetos son transformadores de la vía por la cual se mueven sus posibilidades. Menciona De la Garza (2011): “la incorporación plena del sujeto en la metodología empieza por concebirlo como sujeto objeto y dar cuenta de las objetivaciones que lo presionan así como de sus capacidades de dar significado, todo esto en un espacio objetivo-subjetivo de posibilidades” (De la Garza, 1994 en De la Garza, 2011; 17).

La metodología marxista, mejor conocida como: la metodología de la recostrucción articulada; deja en claro que desecha a positivismos, no mas deductivo, sino que a través de la reconstrucción de la teoría y a partir de las definiciones de las áreas de las relaciones sociales pertinentes al objeto de estudio le dará paso a la selección de conceptos ordenados desarticulados de sus corpus teóricos, seguido de una primera descripción desarticulada con miras a descubrir nuevas relaciones entre los conceptos ordenadores, después una descripción articulada para consolidar los vínculos entre conceptos de diferentes áreas. (De la Garza, 2011).

La reproducción del oficio de carpintero

A pesar de que Jesús María, día a día, se convierte más en una ciudad metropolitana por la relación continua con los municipios de Aguascalientes y San Francisco de los Romos, muchos de los empleados carpinteros de la industria del mueble son habitantes de la comunidad, así como también, los mismos empresarios que actualmente dirigen las empresas. Por lo tanto, la mano de obra se consigue fácilmente, ya que si en algún taller y/o empresa se solicita empleado se pasa rápidamente la voz entre familiares y conocidos para hacer llegar la noticia, siendo así que, las empresas no gastan en publicidad para solicitar a empleados nuevos. Otra forma de conseguir la nueva mano de obra, es a través de la familia de los obreros. Dentro de la comunidad, dedicarse al oficio de carpintero ha llegado a ser parte de una reproducción de generaciones continuas. Dicho de otro modo, algunos lugares de posición dentro de la empresa ya se tienen asignados por el tejido social que se maneja en el contexto de la empresa. Por tal motivo, varias generaciones familiares ocupan el oficio de carpintero.

El Taylorismo considera al obrero como un burro que necesita de una práctica constante para que aprenda y se automatice, es decir, los carpinteros –en este caso-, sea cuál sea su posición en la industria, tiene que ser constantemente reeducados sobre la acción que tienen que realizar, esto para poder tener control sobre ellos y, al mismo tiempo, puedan aprenderlo hasta llegar al punto en que lo realicen mecánicamente (es decir, sin pensarlo), para que después, éste mismo pueda enseñar a un nuevo carpintero. Sin embargo, actualmente el uso del tiempo dentro de las empresas es cada día más vigilado imposibilitando a los obreros para cubrir su trabajo. Por lo tanto, todas las nuevas tecnologías son, ante todo, “un instrumento político de dominación sobre el trabajo. Tecnología y táctica pormenorizada del control de los cuerpos en el trabajo” (Coriat, 2008; 2).  A lo que actualmente se le conoce como “la economía del tiempo”, nacida en los talleres de la tecnología de control y mediadores del trabajo, invadiendo los mecanismos de conjugación de la producción social. Un nuevo modelo de acumulación de capital: la producción en masa, a lo que Benjamin Coriat (2008) menciona: convertir a los obreros en cadena, conseguir su sumisión a la nueva disciplina de la fábrica (Coriat, 2008). Tener hombres libres, entendidos desde la perspectiva de Marx; hombres sin tierra, sin trabajo para que éstos al no tener qué comer, vendan su fuerza de trabajo. En Jesús María pasó algo similar, el fundador de la empresa PROVENCAL al no conseguir trabajo en la localidad, comenzó a realizar trabajos manuales sobre madera de diversos diseños con un estilo único, estilo Luis XV. Al ver la gran demanda en la compra de sus muebles decidió ampliar su taller para que la producción aumentara  y también las ganancias. Siendo así que, actualmente la empresa es una de las más grandes de la comunidad de Jesús María, dedicada al cluster mueblero que cuenta con gran cantidad de empleados de varias generaciones familiares. Los diseños de la empresa son conocidos alrededor de la comunidad y del estado de Aguascalientes, aunque las personas del Norte del país son las que normalmente adquieren más productos de la PROVENCAL.

El oficio de carpintero en Jesús María es latente para las futuras generaciones como lo fue para las pasadas, al ver la gran demanda que existe en la exportación de muebles y la adquisición del oficio a partir de las redes sociales, me lleva al cuestionamiento de:

¿Cómo se aprende el oficio del carpintero?

Tal vez esta pregunta se podría responder desde el sentido común (que es válido), pero sería ignorar todo el tejido de los sujetos sociales que acuñen este oficio como forma de vida, ya que ellos, arrieros de su historia, deciden (sino es que los obligan) reproducir el oficio heredado. Lo que alude este texto, es proponer la indagación social de la repetición del oficio de carpintero porque está, más que latente, en las generaciones familiares, es un sustento para las familias de la comunidad de Jesús María, pero ¿de qué otras posibilidades pueden echar mano los sujetos sociales cuando se encuentran inmersos en este tipo de trabajos? El oficio es conocido, por lo tanto, no se juzga el hecho de que el abuelo y el papá sean carpinteros o que el tío también trabaje en la industria del mueble. El carpintero es tan familiar que pasa desapercibido dentro de la sociedad de Jesús María, el trabajo puede ser acuñado desde los hogares para la gran mayoría, mientras que otros lo aprenden dentro de la industria. A través de los inicios del trabajo de campo, me pude percatar que los trabajadores que aprenden el oficio dentro de la empresa realizan su labor de diferente forma, por lo que también, la forma como conciben su oficio resulta diferente a la opinión de otros compañeros de trabajo. Mientras que para los herederos del oficio – me refiero a los que lo aprenden desde el hogar- el trabajo de carpintero es honrado, un oficio digno, un sustento para sacar adelante a la prole. Siendo así que, tenemos 2 perspectivas del mismo oficio que se abordan de diferente forma. Pero lo que interesa no es la distinción de uno sobre el otro, sino la reproducción del oficio de carpintero. Ya que ésta es un órgano esencial para entender el desarrollo, no sólo económico, sino también social, de Jesús María.


Bibliografía:
Altamira, César (2006) Los Marxismo del nuevo siglo. Editorial Biblios.

Coriat, Benjamin (2008) El taller y el cronometro. Ensayo sobre el taylorismo, el fordismo y la reproducción en masa. México, D.F. Siglo Veintiuno Editores.

De la Garza (1988) “El método del concreto-abstracto-concreto” y “la descripción articulada”, en Hacia una metodología de la reconstrucción. México, D.F.: M.A. Porrúa

                          (2011) “Metodología Marxista y su Herencia en el configuracionismo” en Tratado de Metodología de las Ciencias Sociales.México, D.F.: FCE (en proceso de edición)

Zemelman, Hugo (2008) Pensar teórico y pensar epistémico. Instituto de pensamiento y cultura en América AC.


Hugo Zemelman - En torno del problema metodológico de las mediaciones

La composición de las dinámicas heterogéneas:
La conveniencia de una articulación dinámica entre niveles y momento de realidad, de manera que se peuda expresar la objetivación de cualquier situación dada de un fenómeno particular. 

La cuestión de los parámetros trata de considerar el análisis como ángulo de razonamiento antes que como contenidos teóricos cerrados. Buscar enfoques integrados; la cuestión metodologíca consiste en antes de transformar en objeto de teorización la dinámica sociodemográfica, se requiere un enfoque epistémico-meto. Para dar cuenta de su complejidad.

Partiendo de este reconocimiento de complejidad, es el único camino para poder construir relaciones teóricas inclusivas y comprehensivas. (pos. de teorización). Consiste en problematizar el fenómeno, no reducir al fenómeno a un est. conceptual previamente establecido; reside en el hecho de que es el movimiento de la realidad el que conforma la necesidad de nuevas categorías de razonamiento. 

Hugo Zemelman - Ideas metodológicas para el estudio de sujetos sociales


Para un uso de la teoría que sea históricamente adecuado, debemos distinguir entre:
El pensar teórico que este alude a la formación de las categorías de análisis, mas que a la formulación de enunciados de contenido sobre la realidad y el pensar constitutivo del razonamiento teórico expresa el esfuerzo para aprehender el cambio de la realidad en todas sus formas y en todas sus escalas de temporalidad y de espacio.

Las exigencias cognitivas que plantea el sujeto cuando se le concibe como producente obligan a articular
dimensiones en la perspectiva temporal del momento y de la secuencia, lo cual quiere decir que se tiene que
destacar la dimensión del movimiento interno por encima de las condiciones externas, aunque ambas
dimensiones estén articuladas. (Necesidades y las posibilidades de viabilidad.

Si subjetividad es un campo problemático que conjuga las dimensiones micro y macrosociales supone que se
tenga que entender en una dialéctica que incluya estas dimensiones mecanismos que, pudiendo darse en
plano de la realidad, sean productores de realidades inclusivas. 



domingo, 17 de junio de 2012

Hugo Zemelman - El proceso de cambio y las dimensiones micro y macrosociales


"La idea central que pretendemos desarrollar es que la visión integrada (no simplemente agregativa) descansa en las necesidades que plantea la praxis del sujeto".

Cuando hablamos de sujeto comunitario nos referimos a aquello de conjugar al hombre en su condición de ser histórico y la de sujeto con conciencia capaz de reactuar, se trata de una forma de razonamiento constructor del conocimiento que replantee la cuestión de la empiricidad de la información en función de la dinámica constitutiva de la realidad. Prácticas sociales mediante las cuales la población va construyendo su vida como proyecto desde los planos cotidianos. "La visión integrada de la realidad se manifiesta en una visión trascendente de la vida diaria". Se impulsa las prácticas sociales que construyen la realidad histórica. Es lo que entendemos por conciencia histórica de lo cotidiano. 

Las relaciones entre los rasgos empíricos pueden ser de dos clases: relaciones de implícación, que son aquellas relaciones lógicas derivadas del contenido del elemento particular con su concepto correspondiente; y sus relaciones de articulación, que son las que resultan determinadas por la reconstrucción del conjunto. 

Las prácticas del sujeto comunitario, de manera que se pueda rescatar el microespacio de funcionamiento del sujeto social sin cortar sus vínculos con los planos macroespaciales. 

Hugo Zemelman - Subjetividad y realidad social


"El individuo debe negarse como producto social. O sea que, para ser sujeto, y no mera circunstancia, el hombre debe conquistar su libertad en el marco del desarrollo histórico". La historicidad de lo social constituye una negación de la individualidad, mientras que ésta, en tanto conciencia y vivencia, representa una potencialidad de historia.

La historicidad y subjetividad conforman la realidad como un proyecto de vida social en el que pueden distinguir dos dimensiones: la totalidad de la sociedad que se desarrolla con su propio ritmo, y su aprobación por parte de los sujetos.  La conciencia como visión del propio ser social y de sus horizontes de acciones posibles transforma al hombre histórico en sujeto.

La subjetividad se reconstruye a partir, estrictamente, de la lógica de las acciones individuales cuando se centra en los tipos de sujetos que conforman las organizaciones de los movimientos sociales. La idea del movimiento permite un análisis equilibrado conforme incluye la relación individuo-colectivo en ambas direcciones sin privilegiar a ninguna.

Las representaciones que se hacen de la realidad obedecen a un sistema de información basado en la lógica de metas y condiciones necesarias para su logro; esto es, información sobre datos que permitan reconstruir la viabilidad de un fin determinado, pero que hagan posible definir cuáles son las alternativas de fines viables.

Hugo Zemelman - El pensamiento crítico y su expresión dialéctica


Si la utopía nos obliga a colocarnos frente a la realidad desde determinadas exigencias valóricas, ello representa un imperativo ético para el sujeto concreto, quien se ve obligado -como sujeto de acciones- a asumirse en tanto históricamente determinado, pero a la vez a salirse de sí mismo para no quedar reducido a la condición de producto histórico. A salirse en aras de la propia realización de su subjetividad y de una construcción social en la que pueda reconocer, enriquecer, su identidad.

La historicidad se refiere a la conjugación entre niveles de la realidad y a la secuencia de momentos. Sin embargo, lo que concierne a la ubicación en el momento histórico, se asocia con el desafío de que la realidad construye; idea que se corresponde con el rasgo particular de que la realidad que enfrentamos asume tantos planos sometidos a regularidades como otros que son claramente definibles como procesos moldeables.

"La complejidad alude a la exigencia de articulación dinámica de la realidad. De este modo, la complejidad resulta de considerar cualquier estructura (real o conceptual) como abierta con base en la idea de que está en movimiento"

Hugo Zemelman - Conocimiento y ética. Amanera de introducción.


Hugo Zemelman nos dice: "la intelectualidad latinoamericana se liga con la crisis en las formas de abordar la realidad, que tienen como factor determinante el derrumbe de modelos ideológicos y teóricos. Por lo tanto, ¿qué significa decir que lo que está en crisis es el modo en que la intelectualidad aborda la realidad de sus problemas?  
Hay que pensar, como lo menciona Zemelman, con la racionalidad científica y en esta plantear la construcción de la historia en un contexto mucho más complejo. "El desafío  que se planea es el de la posibilidad de definir la postura desde la cual se superaría esa esclerosis intelectual"; el intento de renovación del análisis con el fin de incorporar más realidades y de enriquecer el conocimiento social con otras dimensiones. 

Zemelman finaliza haciendo alusión de la conciencia histórica, "recuperar la conciencia histórica es un desafío en cuanto supone, por parte del intelectual, tener que abandonar su espacio para comprometerse con su realidad". Una pasión intelectual para encontrar el sentido del conocimiento en la construcción de la historia. "Recuperar la conciencia histórica en el plano del conocimiento significa transformar el conocimiento en conciencia"